Lo siento por el retraso mis queridos he inexistentes
lectores pero es que no encontré el dichoso cuaderno, de por sí ya tendré
problemas en francés pero el punto es que aquí les dejo lo que recuerdo más o
menos que puse en el cuaderno, no es la gran cosa ya que en ese momento me sentía
inspirada y ahora pues fue más al aventón aparte que no sabía de dónde sacar la
inspiración ya que estas semanas se escondió de mi pero bueno basta de excusas
y les dejo leer, así que mis queridos he inexistentes lectores aquí está la
segunda parte del capitulo “PERDIDO”
PERDIDO
(Segunda parte)
― ¿Qué onda Tony? ¿Qué cuentas? ― Dice
Andrew entrando como sin nada seguido de Richard que se dirige a la cocina y
John que se va al sillón y prende la tele.
― Claro, pasen ― Sabía que nunca
preguntarían si pueden pasar o algo por el estilo pero no costaba nada
intentarlo.
― ¿Qué nunca tienes alcohol en esta
casa? ―Se queja Richard revisando
la cocina, ignorando mi indirecta ― Mira nada más,
lo más fuerte que tienes en esta cocina es limonada…. ¡¿qué onda con tigo? ni
siquiera esto tiene alcohol!― Se queja después de escupir la limonada en el
fregadero.
― ¿Sera porque yo nunca tomo? ― ¿Cuando
se rendirán de qué yo nunca estaré en ese rollo? Y lo peor es que Richard es
quien más molesta con ese tema
― ¿Cuándo dejaras de seguir con esa
farsa y te vendrás con nosotros a tomar verdaderas bebidas, no como tu típicos
juguitos y agüitas que tanto tomas? ― Y ahí iba Richard como siempre con sus
comentarios de que no tomo.
― Richard ya sabes que por una extraña
razón te aprecio de alguna forma pero te agradecería mucho si dejaras de
criticar mi forma de ser, o de lo que consumo o no― En realidad no era mentira,
lo apreciaba de alguna forma, el cómo se enfrentaba a sus problemas o a quienes
le causaban problemas ( en su carrera, claro está), era algo de admirar, algo
que pocos lograrían, y aunque suene un chiste o algo así, no necesita ni una
gota de alcohol para hacerlo sin retractarse, ese era su forma de ser.
― Pues en realidad Anthony, veníamos a
ver si esta vez si nos acompañaras al bar ― Respondió John, quien había
permanecido callado hasta este momento.
― John sabes que no me gusta ese tipo
de ambiente, y que no tengo nada que hacer ahí ―Trate de serenarme y ser
sinceró, ya que John antes de entrar en este horrible vicio había sido mi
primer y mejor amigo cuando llegue a Hollywood, hace seis años, él me había
ayudado en mis problemas y me había apoyado en mis decisiones, sean buenas o
malas, él fue como mi hermano, claro eso fue hasta que en una película
conocimos a Richard y Andrew, quienes quisieron meternos en esas ondas a las
que yo no caí pero que John no pudo evitar al haber perdido a su padre, su
único familiar, y esa , según él, fue
razón suficiente para sucumbir al vicio y , por así decirlo, hacer que nuestra
amistad no sea como antes aunque la
verdad yo no sé como reaccionaria si pasara ya que aunque mi familia no esté
con migo se que siguen ahí y eso me ayuda para no caer el él alcohol, por esa
razón trato de entenderlo y no meterme en eso.
― Pero Tony…
― Lo siento John pero sabes que no me
gusta eso, no pueden decir ni hacer nada que me harás cambiar de opinión.
― Ya vámonos Johnny, antes de que le
empeore el humor y nos corra a patadas― Le recomendó Andrew con tono burlón
aunque, en parte, con el humor que traigo no me sorprendería que llegara a ese límite.
― Esta bien ― Respondió John ― ¡Richard,
deja de saquear la despensa de Anthony, ya nos vamos!
― ¡Wow! ¿Qué? ¿Al fin Anthony dejara su
fachada de “Yo no tomo y nunca lo hare”? ¡Esto si hay que celebrarlo! ― Respondió
en tono burlón pero con un toque de seriedad.
― No. Y nunca lo hare― Respondí tangente
― ¿Entonces porque nos vamos?
― Ya déjalo Richard, por hoy no
seguiremos insistiendo― Le respondió John
― Pero porque…― Estaba a punto de
insistir hasta que John lo interrumpió , estoy pensando en de alguna forma unir
a Richard con Nataly, serian buena pareja.
― Porque hoy ya lo intentamos y
volvimos a fallar, ahora deja de lloriquear y sal, yo voy ahora― Dijo antes de
lanzarle las llaves de su amado deportivo.
Ambos le hicieron caso asintiendo con la
cabeza después se salieron por la puerta dejándonos solos
― ¿Ahora cual es el problema? ―Si
había, por hací decirlo, corrido a esos dos era porque me esperaba un buen sermón.
― Anthony se que odias eso hermano,
pero antes eras un poco más discreto al corrernos, dime que es lo que pasa, que
es lo que tienes, porque sabes que siempre me tendrás para apoyarte y ayudarte
en lo que necesites ¿verdad?
― No John no tengo ningún problema ni
angustia si es lo que te interesa así que puedes irte ― Le invite abriendo la
puerta.
― ¿Estás seguro? ― Insistió
― Que siiii― Respondí alargando la
palabra.
― Esta bien hermano, entiendo las
indirectas.
“Pues no parece” pensé
Después de que se marcharon y que por
segunda vez quede solo, y esperaba permanecer así, me senté en un sillón
que estaba en la sala, para poder recapacitar algunas cosas, ahhh si mi vida
era un completo desastre no se que hacia ahí sentado cuando habían miles de
problemas por resolver, mi vida era un laberinto sin salida, estaba perdido,
perdido no sabía ya que hacer no tenia con quien hablar. No tenía amigos, puros
interesados, no tenia novia, solo una niña berrinchuda, no tenia familia, ya no
hablan con migo desde que nos peleamos por no haber asistido a la graduación de
Cristi, mi hermana. Estaba solo en mi departamento solo en una vida llena de
mentirosos, falsos, e interesados no tenia con quien hablar ni nada como dije
estaba perdido en un laberinto sin salida que yo mismo había construido a
medida del tiempo y no podía hacer nada yo mismo me metí aquí y por más que
intentara salir no podía, al contrario me adentraba mas y lo mejor era ya no
moverme y quedarme ahí hasta que el tiempo de el juego se acabe o termine
acabándolo yo mismo porque no había salida y no saldría jamás de ahí, JAMAS.